Qué bonito es tenerte entre mis manos, oler tus hojas, reposar en tus palabras, sentir tus emociones, colocarme en tus personajes y soñar. Eres mi mejor amigo, que cuando llega la noche te cojo con ganas, te absorbo y me inyectas tu magia hasta que se cierran mis parpados apagando la llama.
Gracias a las bibliotecarias de Coria, Marisol y Luisa, que hicieron el milagro de que yo actuara en el Rincón del Obispo y Puebla de Argeme para el día del Libro. El público se lo pasó en grande hasta bailaron. Los más pequeños nunca habían visto una marioneta y yo con mi cariño les hice subir al escenario. Fue una gran fiesta del LIBRO. Leyendo nos convertiremos en mejor personas, os lo aseguro. Leíamos más y mejor.